El collarín cervical rígido (Philadelphia).
1. CONCEPTO
En el politraumatizado, la inmovilización cervical es una prioridad, por las consecuencias que conlleva una mala manipulación de una lesión vertebral a este nivel.
El collarín cervical es un dispositivo que evita la compresión medular limitando el movimiento de flexo-extensión de la cabeza.
El collarín sólo limita la flexo-extensión, pero no la lateralización ni la rotación, por lo que hay que utilizarlos conjuntamente con otros dispositivos (dama de Elche) o con la inmovilización manual.
2. FUNCIONAMIENTO
En su parte anterior, dispone de un apoyo mentoniano-esternal y otro mastoideo-espalda, que mantienen la cabeza en posición neutra y descargan la presión de las vértebras y discos intervertebrales.
3. CARACTERÍSTICAS
- Debe ser rígido, compacto, cómodo y radiotransparente.
- Alinear la cabeza en posición neutra.
- Fácil de montar y colocar.
- Tener un orificio anterior amplio, que permita visualizar la traquea y las venas del cuello y valorar los pulsos carotideos.
- No debe alterar la posición ni la función de las vías respiratorias, ni afectar la circulación cerebral.
- Disponible en varias tallas (3 de adultos y 2 pediátricas).
4. TÉCNICA DE COLOCACIÓN (CON DOS PERSONAS)
- Explorar el cuello buscando heridas, deformidades y hendiduras. Valorar pulsos carotideos.
- Alinear la cabeza en posición neutra.
- Colocar las manos alrededor de la base del cráneo y sostener la mandíbula con los dedos índice y medio, y el occipital con los pulgares y las palmas. A veces, es necesario realizar una ligera tracción para elevar la cabeza. Los ojos deben mirar al frente.
- Elegir la talla adecuada midiendo la distancia entre el trapecio y el borde mandibular inferior (ver figura). Si es pequeño, puede comprimir las vías respiratorias y los vasos del cuello y si es grande, no inmovilizará adecuadamente.
- Retirar pelo, ropa, cadenas y collares.
- Sin que el primer rescatador suelte la cabeza, el segundo coloca el collarín alrededor del cuello. No soltar la cabeza una vez colocado.
- Asegurar correctamente los elementos de fijación.
- Sólo una vez colocado el inmovilizador tetracameral (dama de Elche), se puede soltar la cabeza.
5. POSIBLES COMPLICACIONES
- Posibilidad de lesiones espinales por mal uso.
- Aplicar una talla grande, obligando a la extensión cervical o inmovilizando deficientemente.
- Usar una talla pequeña o apretarlo excesivamente, produciendo dificultad respiratoria, mal retorno venoso e incomodidad.
- Cierre inadecuado, produciendo una pérdida brusca de la inmovilidad.