martes, 17 de febrero de 2015

Signos de infección en una herida


A menudo, tenemos que hacer la cura de una herida aguda con un cierto tiempo de evolución. Antes de proceder a su cura, debemos valorar al paciente y a la herida. La identificación precoz de la infección en una herida permite adoptar la intervención antimicrobiana adecuada, ya que la infección requiere un diagnóstico y tratamiento antimicrobiano adecuados.

  1. Contaminación: todas las heridas pueden adquirir microorganismos. Si la especie bacteriana no dispone de las condiciones físicas y nutricionales adecuadas, o si no es capaz de superar las defensas del huésped, no sobrevivirá ni se diseminará.
  2. Colonización: las bacterias crecen y se multiplican, pero no producen daños al huésped ni desencadenan una infección de los tejidos.
  3. Infección: los gérmenes crecen, se multiplican e invaden los tejidos provocando lesiones tisulares y reacciones inmunitarias. La cicatrización de la herida se interrumpe.
Para saber si una herida aguda (no reciente) está infectada, debemos valorar los siguientes signos y síntomas:
  • Eritema circundante o bordes enrojecidos.
  • Exudado hemopurulento o seropurulento.
  • Edema o formación de bolsas alrededor de la herida.
  • Elevación local de la temperatura cutánea.
  • Hipersensibilidad al tacto.
  • Induración.
Retraso de la cicatrización.
  • Mal olor.
  • Dehiscencia si ha habido sutura previa.
  • Decoloración.
  • Tejido de granulación que sangra con facilidad.
 

domingo, 15 de febrero de 2015

Farmacovigilancia. Sistemas de notificación de efectos adversos


El Sistema Español de Farmacovigilancia es un método de vigilancia para la identificación de reacciones adversas detectadas en los medicamentos comercializados.

Se trata de un organismo descentralizado, coordinado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), que recoge, elabora y procesa la información sobre medicamentos y sus efectos adversos. Asimismo, realiza estudios para evaluar la seguridad de los fármacos.

El Sistema Español de FV se integra, a su vez, dentro del Programa Internacional de la OMS de FV y su objetivo es generar de manera precoz “alertas” sobre la posibilidad o sospecha de reacciones adversas causadas por un medicamento.

Como digo, recoge sospechas y NO evidencias, y se sustenta en el compromiso de los profesionales sanitarios para notificarlas, constatando así que aparecen de manera reiterada.

El análisis de esta información permite a las autoridades sanitarias adoptar medidas reguladoras ante la aparición de efectos secundarios, incluyendo la retirada del producto del mercado.

Los métodos de notificación de productos comercializados (excluyendo los de uso compasivo), son:

 1.- PROGRAMA DE NOTIFICACIÓN ESPONTÁNEA

Es una aplicación para la comunicación, identificación, recogida, registro y evaluación de notificaciones de sospechas de reacciones adversas a fármacos al Sistema Español de FV.

Actualmente es el método más utilizado por los profesionales sanitarios.


http://www.aemps.gob.es/vigilancia/medicamentosUsoHumano/SEFV-H/NRA-SEFV-H/home.htm

 2.- LA TARJETA AMARILLA

Es un formulario (en formato electrónico o papel) para notificar las sospechas de efectos adversos a medicamentos comercializados.

Las Tarjetas Amarillas se remiten al Centro del Sistema Español de FV, donde son evaluadas, codificadas e incorporadas a una base de datos nacional (FEDRA), a su vez, conectada a una base central de la OMS.

Tanto los datos del notificador como los del paciente son confidenciales
.


Filtros HEPA


Todos hemos visto y/o montado la cámara de bioseguridad y sabemos para lo que sirve,
pero… ¿En qué basa su funcionamiento?


La cámara de bioseguridad utiliza un filtro HEPA (del inglés, High Efficiency Particle
Arresting) o filtro de alta eficiencia.


Los filtros HEPA están compuestos por una malla de fibra de vidrio entrelazada sin un
patrón fijo. El espacio entre las fibras puede variar entre 2 y 0´5 micras, pero retiene
partículas mucho más pequeñas haciendo que éstas impacten contra las fibras cuando
son arrastradas por un flujo de aire (de ahí que tengan que funcionar con presión positiva o negativa).


La eficacia del filtro se incrementa conforme aumentan la densidad de la malla, el diámetro de las fibras y la velocidad del aire, llegando a conseguir un nivel de protección del 99´995 % en los filtros de más alta gama.

A su vez, el filtro de la cámara de bioseguridad, lleva incorporado una pantalla de luz ultravioleta de alta energía que aumenta su eficacia eliminando los agentes patógenos atrapados en la malla.

Además de las cámaras de bioseguridad, otras aplicaciones de los filtros HEPA son las unidades de pacientes críticos, trasplantes, quemados, quirófanos, aviones comerciales y vehículos militares con protección BQ.

Sensación térmica


Todos hemos oído hablar del término sensación térmica, pero … ¿a que se refiere exactamente?

Llamamos sensación térmica al grado de incomodidad que una persona siente como resultado de la combinación de la temperatura, el índice de humedad y la velocidad del viento, y está directamente relacionada con el riesgo de hipotermia.

Hay varios métodos para calcularla - todos con un grado diferente de fiabilidad – pero actualmente uno de los más utilizados se basa en la siguiente ecuación:

SENSACIÓN TÉRMICA = 13,12 + (0,6215 x T) – (11,37 x V)0,16 + (0,3965 x T x V)0,16

Donde T es la temperatura y V la velocidad del viento.


La Unidad Internacional


Al mirar el prospecto o la ficha técnica de un medicamento, solemos encontrarnos una unidad de medida representada como UI o IU (por sus siglas en inglés).

En farmacología, la Unidad Internacional es la unidad de medida de la cantidad de una sustancia, basada en su efecto esperado (actividad biológica mediada).

La definición precisa de una UI difiere de una sustancia a otra y es establecida por acuerdo internacional.

El Comité de Estandarización Biológica de la OMS proporciona una preparación de referencia de una sustancia determinada, fijando el número de UI´s contenidas en esa preparación. Posteriormente, crea un procedimiento para comparar esta preparación de referencia con otros compuestos.

Ventaja de este método: diferentes preparaciones con el mismo UI, contienen el mismo efecto biológico.

Se suele usar para vitaminas, hormonas, drogas, vacunas, hemoderivados y sustancias biológicas activas similares.

Ajuste del fonendoscopio


1. Alineación de los auriculares: los fonendoscopios tienen unos auriculares diseñados para ser utilizados con un ángulo anatómicamente correcto, con los canales auditivos hacia delante. Antes de colocarse las olivas, sujetar el fonendo de forma que los tubos apunten hacia delante y la campana hacia adentro. Colocarse los auriculares en esta posición. No todos tenemos los canales auditivos iguales, por lo que si despues de colocarlos, éstos no quedan bien ajustados, debemos moldear los tubos.

Llevar los auriculares de forma incorrecta puede ocasionar un mal sellado de las olivas y, en algunos casos, el bloqueo del sonido.

2. Ajuste de las olivas: es importante utilizar olivas del tamaño adecuado. Si éstas son demasiado grandes o pequeñas, puede producirse una mala acústica. Usar el tamaño ideal de las olivas para una acústica óptima.

3. Obstrucciones: si se suele llevar el fonendo en un bolsillo o si no se limpia con frecuencia, es posible que la suciedad esté obstruya las vías por las que circula el sonido. El cuidado y mantenimiento rutinario previene que esto ocurra.

4. Comprobación del sellado: Los fonendoscopios se basan en un sellado hermético para transmitir los sonidos corporales desde el paciente hasta el oído. Partes sueltas o mal enroscadas en la campana o el tubo, o el deterioro del mismo, pueden provocar la pérdida de esta hermeticidad.


El medicamento genérico (EFG).


Muchas veces hemos oído decir a los pacientes – e incluso a profesionales sanitarios - que los medicamentos genéricos no son iguales a los originales.

Pues bien, según la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), el genérico debe demostrar que su principio activo es biocompatible* en un 80% o más con el fármaco original y tiene que cumplir con todas las garantías y requisitos de calidad y seguridad exigidas al medicamento de referencia. Además, deben ser más económicos.

Un genérico es un medicamento** autorizado una vez que ha demostrado su bioequivalencia con el fármaco al que sustituye, cuando para éste ya ha expirado el periodo de protección de datos (o sea, han transcurrido al menos diez años desde su autorización).

En España, la AEMPS es el organismo que evalúa los medicamentos de fabricación industrial antes de su comercialización (entre los que se encuentran los genéricos). Además realiza una vigilancia continua, controles de calidad y se asegura de que cumplan en todo momento con las garantías necesarias para su uso en humanos.

Los medicamentos genéricos, se identifican por las siglas EFG (equivalente farmacéutico genérico) junto al nombre que figura en el envase.


(*) Biocompatibilidad: capacidad de una sustancia de realizar una función terapéutica deseada en un receptor, sin provocarle efectos colaterales.

(**) Medicamento: principio activo (fármaco) + excipiente/s.


Fluidoterapia en el paciente politraumatizado


Como sabemos, las soluciones coloidales son muy usadas en la reanimación de pacientes politraumatizados, aunque últimamente se plantea su efectividad cuando los comparamos con preparados cristaloides.

Los cristaloides son sueros que permiten la reposición equilibrada de agua y electrolitos, aunque producen poca expansión de volumen intravascular, por lo que su administración en grandes volúmenes suele hacerse acompañada con un coloide (normalmente 3:1).


En cambio, los coloides son soluciones de reposición caracterizadas (aunque no ampliamente demostrada) por una mayor expansión plasmática y una permanencia más larga en el espacio intravascular.

Pues bien, según estudios, no existen claras evidencias de que los coloides reduzcan el riesgo de muerte en reanimaciones de pacientes politraumatizados, quemados o postquirúrgicos comparados con soluciones cristaloides. Además, tienden a aumentar el fallo renal, el riesgo de anafilaxia y son más caros.


Manejo inicial del quemado adulto. Ecuación de Parkland


Uno de los aspectos más importantes en el manejo de urgencia del quemado, es el inicio de la reposición de volumen con fluidos e iones para mantener los órganos vitales perfundidos.

Muchas fórmulas de reanimación del quemado han probado ser clínicamente efectivas, aunque todas difieren en el volumen y el contenido iónico.

En la actualidad, la ecuación más utilizada es la de Parkland

F24 = 4 ml X Peso paciente (en Kg) X % de SCQ (Superficie Corporal Quemada)

La mitad del resultado se administrará en las primeras 8 horas y el resto en las siguientes 16.

El ringer lactato es preferible al suero salino al 0.9% para evitar la acidosis hiperclorémica, por la gran cantidad de volumen que estos pacientes demandan.


Por ejemplo, un paciente de 75 kg con un 35% de superficie corporal quemada:

Fluido Total en 24 horas = 4 ml/Kg X Kg del paciente X % de SCQ; o sea

F24 = 4 ml/Kg X 75 Kg X 35% SCQ = 10.500 ml


Luego, el volumen (en ml) que debemos administrar al quemado es:
  • En las primeras 8 horas = 5.250 ml
  • De 9 a 24 horas = 5.250 ml

Para determinar el ritmo de infusión a administrar en las primeras 8 horas, dividir la primera de estas cantidades entre 8 --> F8 = 5.250 ml / 8 horas = 650 ml/h.
 
Y el flujo en las siguientes 16 h … dividir entre 16, o sea, 325 ml/h.

Para saber más… PHTLS 8ª edición


Monitorización cardiaca. Colocación de electrodos


Los electrocardiógrafos y la mayoría de los monitores, tienen 10 electrodos con los que monitorizan las 12 derivaciones.


Si sólo queremos sacar una tira de ritmo, nos valdrá con colocar sólo los electrodos de los miembros: LA, RA, LL y RL. Con ellos monitorizamos las 6 derivaciones bipolares: D1, D2, D3, aVR, aVF y aVL (ver triángulo de Einthoven).

Pero si queremos hacer un EKG completo, tendremos que poner otros 6 electrodos para ver las derivaciones monopolares (de V1 a V6).

Aunque no es muy habitual, puede que nos pidan un electro de las derivaciones posteriores. Para ello, tendremos que cambiar V1, V2 y V3 por V7, V8 y V9 respectivamente.

También podemos hacer un EKG derecho, para lo que tendremos que colocar los electrodos de izquierda a derecha empezando por el 4º espacio paraesternal izquierdo V´1.

Resumiendo:
  • Rojo: M.S.D.
  • Amarillo: M.S.I.
  • Verde: M.I.I.
  • Negro: M.I.D.
  • V1: 4º espacio paraesternal dcho.
  • V2: 4º e. paraesternal izdo.
  • V3: entre V2 y V4.
  • V4: 5º e. línea medioclavicular.
  • V5: 5º e. línea axilar anterior.
  • V6: 5º e. línea axilar media.
  • V7: 5º e. línea axilar posterior.
  • V8: 5º e. vértice escapular.
  • V9: 5º e. línea paravertebral izda.